La Quiaca - Yavi 16km - 15min en chata
Al lado del mercado de la quiaca, varias chatas te ofrecen viajes, nos subimos a una con destino a Yavi, que en la caja por $13 c/u nos dio un paseo increíble!
Los cerros cambian de color en lineas horizontales, como laminas que van del marrón claro y oscuro, verdes y rosas.. la señora que va en la chata con nosotros nos cuenta que esos cerros los llaman "los ocho hermanos" ya que son ocho cerros casi iguales en forma y color...
los que nos acompañan en el viaje, son productores y habitantes de Yavi, que van a La Quiaca a vender sus productos de la huerta, animales y pieles para poder vivir...
y al llegar quedamos alucinados...
Todas las casas de paredes de adobe, piso de cemento y tierra.. los techos de paja, barro y cañas, con tirantes de eucaliptos.. Todo se envuelve en un marrón clarito, la paz es absoluta y la gente te saluda como dándote la bienvenida...
A las 14hs, los que no duermen, hacen sus quehaceres, así que fue con mucha paciencia que encontramos a los dueños de las posadas para preguntar los precios de las habitaciones en las casas de familia.. En gral todos tienen habitaciones privadas con baños privados, que rondan entre los $120 (posada aires de yavi) $140 y $160 (aborigen) y $250 (hostería), nos quedamos con la posada..
..en la última calle, un lugar de ensueño..
y abriendo la ventanita un paisaje aún mejor..
En la callecita principal de Yavi, las casas de familia se abren para ofrecer un lugarcito para comer: estofado de llama, pastas, milanesas de llama, pizzas.. Un menú ronda en los $35 por persona..
Después de comer, un hermoso y friolento pero necesario baño. Después de 30 min de fiaca dimos un paseo río abajo.. No llegamos hasta la cascada porque la noche nos venia pisando los talones, pero el río te va llevando por un camino de rocas pintorescas, con plantas del árido como espinillos y cactus que salen de entre las piedras florecidos..
Del otro lado del río, en frente, se ven los campesinos cultivando, los mismos que nos contaban en la chata que viajan varias veces al día hacían La Quiaca para vender lo que cosechan..
La noche ya estaba a pleno, después de unas vuelta por el pueblo y de ver una hermosa tormenta posarse sobre Yavi nos acostamos para pensar qué comeríamos.. Mientras escuchábamos los truenos, caímos rendidos..
A la mañana siguiente, 7:00hs arriba! mientras andábamos, escuchamos que había nevado en el cerro..
Fuimos a visitar la iglesia construida en el 1600 por los indígenas del lugar, bajo el mando del marques, éstos fueron relegados de sus tierras por los españoles que años después inventaron títulos en otro continente para apropiarse de estas tierras..
El museo muestra las características de ambas culturas.. La que habitaba en Yavi, y la que vino a invadirla..
Después, volvimos a la orilla del río para
para apreciar mejor con el sol, las pinturas rupestres de las rocas..
Desayunamos en el bar de Carmen, la elogiada cocinera de Yavi, en una mesita de madera, con mantel de aguayo y sillas tapizadas con cuero de vaca que conservan los pelos..
A buscar los bolsos, esperar la chata que nos llevaría a la quiaca nuevamente para ir desde ahí a La Quiaca..
Nuestro destino era Iruya, pero solo se puede ir desde Humahuaca.. Entonces los siguientes pasos serían: La Quiaca - Humahuaca - Iruya
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